El edificio cuenta la historia de la ciudad de Asti en su historia judía, y es un placer presentarles un piso único entre Corso Alfieri y Via Incisa. La prestigiosa entrada conduce a la impresionante escalera que nos acompaña hasta la tercera planta del edificio. La primera parte del piso, utilizada como estudio por el actual propietario, consta de un hall de entrada sobre el salón con chimenea, una segunda habitación muy luminosa también con chimenea, 2 dormitorios, cuarto de baño. La parte residencial consta de un hall de entrada, un dormitorio, un comedor, un estudio, una maravillosa cocina que da a la esquina de Corso Alfieri y Via Incisa. Las bóvedas son todas de cañón, lo que hace respirar el encanto del tiempo.